30 de septiembre de 2008

Los piojos: evangelizadores del rock

Hace un tiempo, mientras le hacía una nota a Julio Maggi, Gerente de Marketing del TC 2000, le pregunté como se planificaba el Marketing en un deporte que genera tanta pasión como los autos de carreras y me contestó que ellos estaban abocados en la fidelización del cliente centrado en la zonas VIP con un servicio premiun para que los fanáticos pudieran vivir el automivilismo desde adentro mismo del circuito girando con los pilotos. Es que no basta que consuman lo que vendes sino que se identifiquen con tu marca o servicio.

Con los seguidores de Apple pasa lo mismo. A ellos se le puede aplicar el termino prosumer término viene de juntar producer y consumer, y define a los consumidores actuales que ya no se contentan con comprar los productos, si no que hablan de ellos o los recomiendan a su círculo de amistades. Son verdaderos fundamentalista de una marca.

Pero en las bandas de rock ese sentimientos llega a niveles solo alcanzado por el fanatismo del fútbol. Las bandas generan una pasión que llegan al punto de evangelizar a sus seguidores. Tienen miles de fanáticos bandas como Metallica, que se encargó de emprender una "caza de bruja" contra sus seguidores que bajan sus temas de internet, como contra Napster, uno de los primeros programas p2p. Los mismos seguidores que les "dan de comer".

Un jóven del público toca los acordes de Bicho de Ciudad.

Pero en el otro extremo se encuentran Los Piojos, que en su paso por Córdoba, dieron un show vibrante y excelente. Tan vibrante que sobre el final, su líder y cantante, Ciro Martinez tuvo la excelente idea de hacer subir a un integrante del público para que tocara la guitarra en el tema Bicho de Ciudad.

En ese instante, el show encontró que su punto mas alto, no porque fuera la segunda vez que sonaba "el último tema del recital", ni porque estuviera por empezar uno de los temas que será en unos años un clásico de la banda porteña, sino porque los fans encontraron una reciprocidad en sus ídolos poca veces vista. Esa fidelización que ningún marketing le podrá dar a una marca sino es la misma marca la que pregona eso.

24 de septiembre de 2008

Este juicio ha terminado

Pero la lucha continúa...


La Comisión y Archivo Provincial de Memoria de Córdoba inauguró la muestra "Este juicio ha terminado" en la ex D2, el ex centro de detención ubicado en el centro de la ciudad de Córdoba, que en la actualidad funciona como museo de la memoria.
La muestra realiza un recorrido fotográfico del Juicio Histórico que se realizó en nuestra provincia donde se sentenció en una tarde soleada de julio, a cadena perpetua en cárcel común a Luciano Benjamín Menéndez y otros siete represores.


En la muestra uno puede encontrar dos fotos que sacó Leo Luna, fotógrafo del diario Comercio y justicia, con quien cubrí ese importante acontecimiento aquel 24 de julio.
La noche antes de que se leyera la sentencia del juicio había escrito que como muy pocas veces, pude sentir que estaba en presencia de un hecho histórico mientras este transcurría. Sentimiento que lo corroboré durante toda la extensa jornada cargada de emociones y sentimientos. Tan fuertes como desgastantes.
Y en este marco, las fotos de los abogados Martín Fresnda y Caludio Oroz, querellantes del juicio a Menéndez, retratan lo que cuento: EUFORIA POR EL TRIUNFO y UNION EN LA LUCHA.

12 de septiembre de 2008

Reunión de tapa


20 minutos realizó una recopilación de las tapas de los principales diarios del mundo del día después del atentado a las Torres Gemelas el 11 de setiembre de 2001. En la selección se encuentra la de La Nación y la del The Examiner que me pareció impactante.

11 de septiembre de 2008

El Pichi

Entró al aula de manera lenta y sostenido por sus muletas. Las dejó apoyadas en el banco, se sentó en el y con la ayuda de sus manos se cruzó de piernas. "El tema es simple: los que no quieran estar acá, se van. Vuelven en diciembre con un kilo de helado y los apruebo. Ahora, los que se quedan, es porque van a estudiar y a prestar atención", dijo y todos los alumnos se miraron esperando que alguien los pelliscara para despertar de este sueño.



Empezaba el año lectivo de 1998 y la única certeza que tenía era terminaba la secundaria y que en historia universal tendríamos al Pichi Paserini. Durante los ocho años de secundario, mientras almorzaba sentados en la vereda del Manuel Belgrano con mis compañeros, lo que mas mes me sorprendía no era que siempre veíamos al Pichi entrar al edificio por una puerta ubicada en la esquina, a pocos metros de un estacionamiento reservado para discapacitados, donde siempre dejaba su auto, sino que siempre estuviera rodeado de sus alumnos.

Era una más de las tantas leyendas que había en el colegio. De él se decía que estaba en muletas porque fue el último caso de poliomielitis que hubo en la Argentina. Que estuvo de novio con una alumna de él muchos años antes de que ingresáramos. Que le había pagado los estudios a otra alumna para que continúe los estudios después de haber quedado embarazada de un compañero de curso. Pero la que mas intriga me generaba, era que no daba el programa de la materia, si no que el tomaba "otros" temas.

Así que ese año, los 15 alumnos que nos quedamos en el aula el primer día de clase de los 33 que éramos, descubrimos cual era realmente el encanto que generaba entre los que los rodeaban. El contaba que su materia se daba en dos años. En séptimo se daba de los problemas de las sociedad occidentales y en octavo una alternativa para solucionar los "males" e las sociedades modernas: cultura oriental.

Como buen argentino, despotricaba que todo estaba mal organizado. Que mi curso, que no estuvo con él en séptimo no podía empezar "en la mitad" de su materia. Sin embargo, él no sabía que a los 17 años una persona ya comprende cuales son los problemas de las sociedad modernas y que a esa edad como a cualquier otra, saber que se quiere para el futuro también puede generar depresión.

Él decía que "la paciencia era invento chino" y que como daba clase de cultura Oriental, con mi curso haría una excepción y nos daría las dos materias en un año. Mas que dictar unidades, él nos daba lecciones de vida, que no había que rendirlas en exámenes, porque si no entendíamos los que decía los aplazos nos los daría la vida.

Se adelantó ocho años a la película el efecto mariposa, relatándonos la teoría del caos y enseñándonos que los orientales consideraban que todo estaba relacionado con todo. Que toda causa tiene un efecto, y que nuestros pequeños actos podían lograr grandes cosas.

Desde su excelente posición económica y con anillos de oro que te quitaban la preocupación de llegar a fin de mes, nos decía que viajáramos todo lo que pudiéramos. Que viajar hace al hombre mas sabio y que por lo único que vale la pena endeudarse es por un viaje.

En tiempos en los que nos pasamos mas tiempo en el trabajo que en nuestro hogar, en tiempos en los que para reunirse con amigos hay que chequear la agenda o armar un grupo en Facebook, entiendo a que hacía referencia el Pichi cuando nos hablaba de que tomáramos un día de la semana para nosotros. Un día en que no hiciéramos nada. Donde solo realizaríamos aquellas cosas que nos gustan. Nada de responsabilidades.

Tuvimos una buena relación, cuando hacía un buen análisis de algun tema me decia que estaba "mas garriguista que nunca". A fin de año, le pedí que me entregara el diploma y a él cada vez mas le costaba moverse, por lo que fue imposible. No me importó, porque sin enseñarme nada, fue del que mas aprendí y ese era el diploma que tendría para el resto de mi vida.

Bis histórico

El destino parece ensañarse con las fechas, para cargarlas de significados y de connotaciones, en donde los numerólogos, encuentran mensajes grabados que con el paso del tiempo toman dimensión.

Eso parece demostrar el 11 de setiembre. En el 2001 vimos como el mundo cambiaba, a medida que las torres gemelas del World Trade Center se derrumbaban y Geroge W Bush, presidente de los EE UU, sumergía a su país en una guerra contra el terrorismo que ocultaría otros intereses.

Bush, en su discurso en el Congreso de EE UU unos días después del ataque a su nación, dijo que "el 11 de septiembre, enemigos de la libertad cometieron un acto de guerra contra nuestro país" y que las pruebas que reunieron los EE UU apuntan "todas a una colección de organizaciones terroristas conocida como Al Qaeda". El enemigo tenía nombre y apellido: Osama Bin Laden.

Desde ese día el mundo ya no sería el mismo. Como tampoco lo había sido años antes en esta parte del continente. Otro 11 de setiembre, pero 1973, Ámerica Latina dejó de ser la misma. Otra guerra se libraba y enemigo también era claro: el marxismo.

Los militares, apoyados por el Gobierno estadounidense, se ecolumnaron detrás de Augusto Pinochet y bombardeando el Palacio Presidencial de la Moneda, hicieron epicentro en Santiago de Chile, derrocando a Salvador Allende y sacudieron los cimientos de toda una región que soñaba con un mundo distinto. Se empezaba a aplicar en la región, la Doctrina de Seguridad Nacional, aparecía en el vocabulario la palabra "desaparecido", y el vocablo "golpe" se empezaba a escribir con sangre y torturas.

Un chileno exiliado en nuestro país, me relataba que el golpe a Salvador Allende tomó cuerpo cuando se cortó la transmisión de todas las radios del país y se leía un comunicado de las Fuerzas Armadas que instaba al presidente a abandonar su cargo. Pero la historia se escribe como un guión de película.

Sin embargo, había quedado una sola radio sin intervenir. La Radio Magallanes, se usaba en esa época, y a esto me refiero cuando hablo de guión de cine, se usaba en esa época, para transmitir desde la Casa de la Moneda las noticias oficiales.

Entonces, rodeado por tanques militares y sin que mediaran nuevas tecnologías, toda la ciudadanía supo que Salvador Allende iba a hablar a través de Radio Magallanes. Por eso, el presidente de Chile pudo dar su último discurso a los ciudadanos a las 8.45 del 11 de setiembre de 1973, antes de que el bombardeo se llevara su vida y la democracia del continente.


"Tengo la certeza de que mi sacrificio no será en vano, tengo la certeza de que, por lo menos será una lección moral que castigará la felonía, la cobardía y la traición", sostuvo Salvador Allende, segundos antes de morir. Augusto Pinochet, quien entró sin justicia a la Casa de la Moneda, se fue de este mundo sin condena. Sin embargo, en Argentina, ni su sacrificio, ni el de nuestros 30.ooo "salvadores allendes" pareciera ser en vano.

4 de septiembre de 2008

Mayumana: ritmo repetitivo


Podría decir del show de Mayumana lo que todo el mundo sabe o espera que se diga: Que es la mayor expresión del lenguaje corporal sobre un escenario. Que es increible como los actores de la compañía israelí hacen sonido con todo lo que tocan, aunque eso suene tan redundante como obvio. O que el ritmo que baja del escenario encuentra su eco en el público, que aunque esté sentado, genera cierta energía con los aplausos y risas.

Los distintos actos que componen el espectáculo, de mas de una hora, dejan a la vista dos detalles para el espectador: la simpleza de los objetos que usan para hacer las coreografías y que el cuerpo humano mas allá de ser una máquina perfecta, es después de Mayumana, un instrumento perfecto.

Sin embargo, quiero decir que el espectáculo es sumamente atractivo y divertido. Pero no es nada que nos vaya a sorprender, mas si uno ya se adentró en la oscuridad sensorial de De La Guarda en "Villa Villa" o si transpiró al ritmo de Fuerza Bruta. Mayumana se compone del eco de sus antecesores y competidores; y eso en un show deja al espectador en un constante deja vu.

3 de septiembre de 2008

2-S

Boomp3.com

Mi destino no lo elijo yo y el camino tampoco
aprendimos solamente a flotar y a vivir como locos
tenés permiso para quedarte a mirar solo quieren tu voto
si te dicen que todo va a mejorar ya no los mires
y nunca te olvides que…
fueron ellos fueron ellos



ya se van y les enferma la idea
de no lograr robarnos lo que nos queda

esas ganas de no querernos callar
y de juntarnos de a poco
que no paremos nunca más de cantar
y que brindemos
porque sabemos que…
fueron ellos fueron ellos

va a terminar llega el final
dentro de un rato será de nosotros, todo
llego el momento de dejar de llorar
porque no tienen tu voto
y si te dicen que todo va a mejorar ya no los mires
y nunca te olvides que…
fueron ellos fueron ellos
fueron ellos fueron ellos.

Fueron, No te va a gustar


Foto: Leo Luna de Comercio y Justicia.

Tender una mano al periodismo


El intendente de Córdoba Daniel Giacomino se apresta a hablar luego de habilitar las obras de recuperación que se efectuaron en la Casa Giratoria. Piensa lo que va a decir mientras los periodistas se abalanzan hacia él. Una infinidad de grabadores siguen al infaltable de Cadena 3, que aunque está en el lugar que se genera una noticia, muchas veces está ahí para desinformar. Entre tantos grabadores sorprende una palma de la mano hacia arriba que no tiene ningún aparato. Entonces Giacomino, juntando gracia de donde no tiene le dice:

-Que pones la mano así, querés que te de una moneda?

El periodista lo mira, como si su cometido hubiera salido tal cual él lo pensó.

-No. Lo que pasa es que ya no tengo radio.